El 29 de diciembre, el Estadio Monumental fue testigo nuevamente del festejo rosarino: Central empató 1 a 1 con San Lorenzo y se aseguró así su segundo título de la década, y el séptimo a nivel nacional de su historia. Durante muchos años, la negativa del Athletic a guardar minutos de silencio por las víctimas de ETA definió a un estadio que, en realidad, siempre fue menos beligerante que Atocha o El Sadar. El conjunto canalla comenzó perdiendo gracias a un gol de Héctor Scotta a los pocos minutos de haberse iniciado el encuentro. En la década de 1960, el club iba creciendo con los años: de los pocos socios que tenía en sus inicios, llegó a 4000 durante 1965 gracias al trabajo de su presidente Federico Flynn. La derrota 1 a 0 en la vuelta no hizo mella en el conjunto auriazul, ya que el global de 3 a 1 a favor lo clasificó para disputar la final del campeonato.
Composición: 100% Algodón. Color: Rojiblanco y azul con el logo y escudo del equipo. La final enfrentó al equipo de Zof con el Racing de Córdoba, dirigido por Alfio Basile. Al entrenador Ángel Tulio Zof le costó ensamblar las piezas y el equipo clasificó con lo justo para los cuartos de final, ganándole el último partido de la fase regular 2 a 0 a Vélez en el Estadio José Amalfitani. A partir de esa instancia, Central hizo valer la condición de local ya que las diferencias de gol marcadas en el Estadio Gigante de Arroyito fueron claves para que Central avanzara a las rondas siguientes y conquistara un nuevo título. Los referentes del equipo del ascenso fueron Alfredo Fógel, el capitán del equipo, y Eduardo Di Loreto, que convirtió 29 goles. El club porteño había sido la revelación de este torneo, pero no le alcanzó para superar al equipo de Griguol. Griguol impuso su estilo propio de juego, basado en el orden defensivo y la efectividad a la hora de atacar. El estado físico del equipo sumado a la experiencia de los caudillos —Pascuttini, Fanesi, Carrascosa, entre otros— hizo capaz que Rosario Central alcanzara el título. River Plate tenía casi 15 años sin conseguir un título oficial —el último había sido en 1957—, y con esa presión jugó el partido de visitante ante los de Arroyito.
Central clasificó junto a Atlanta, River y San Lorenzo para disputar el cuadrangular final. La final del campeonato fue ante San Lorenzo y se debía disputar también en terreno neutral. Rosario Central disputó ese certamen junto a los campeones del Nacional 1974 y Metropolitano 1974: San Lorenzo y Newell’s Old Boys, respectivamente. En el marco internacional, Boca fue ganador tres veces (2004, 2005 y 2006) del Campeonato Sudamericano de Clubes Campeones. 67′ Pisotón sobre Kroos en el centro del campo que sanciona Clattenburg. En el primer juego de la zona final Central ganó 3-1 sobre los millonarios con tantos de Cabral, Bóveda y otro de J.J. En el segundo semestre de 1973 Rosario Central volvería a ser protagonista del fútbol argentino. Pero, finalmente un día, aquello que realmente parecía impensado sucedió: Diego Armando Maradona, el eximio jugador de fútbol argentino que ha cautivado al mundo entero con su habilidad para dominar la pelota, falleció a los 60 años.
Uno de los institutos que promueven el fútbol como cultura a nivel internacional es el Goethe-Institut, que ha realizado exposiciones alrededor del mundo cuyos temas eran el fútbol. Agrupadas por las afinidades del idioma y en la preservación de la cultura y añoranzas de la tierra natal, las colonias fundaron clubes que acabaron aportando un gran legado al fomento del deporte. El ’10’ no defraudó y mostró una camiseta con ese dorsal de Newell’s Old Boys, donde Messi dio sus primeras patadas al balón, y el Pelusa las últimas, siendo el único club -además del Barcelona- que ambos han compartido. Además el 8 de diciembre se pasó una antorcha de mano en mano por atletas desde la sede en el centro de la ciudad hasta el estadio, donde Thomas Hooper, uno de los fundadores, dio un discurso. Si bien el equipo estaba medianamente armado y mantenía una estructura sólida, Angelito metió mano y retocó algunas cosas.