Con sus constantes looks de street style dejando intuir su pecho bajo toda clase de prendas (desde una camiseta básica hasta un jersey de punto), la pequeña del clan Kardashian deja claro que quitarse el sujetador en 2017 tiene poco que ver con llevar escotes imposibles o prendas que requieran deshacerse de él. Aunque ir sin sujetador tiene, sin lugar a dudas, connotaciones feministas y políticas, la nueva hornada de celebrities millenials que prescinde de él probablemente lo hagan por una mera cuestión estética.